INTRODUCCIÓN

El castillo de Caravaca, como todas las fortalezas, tienen como primer valor la dificultad de acceso, ya que precisamente, de lo que se trataba cuando se realizaban estas construcciones, era evitar que pudiesen ser tomadas por fuerzas enemigas de forma sencilla, de ahí su localización siempre en alto, en lugares escarpados donde poder construir una atalaya.

Pero con el paso de los siglos, se ha ido utilizando con diferentes usos, fortaleza, almacén, mezquita, iglesia, convento, cárcel, cuartel, colegio, etc. Hasta llegar a la actualidad, cuando miles y miles de peregrinos de todo el mundo vienen a adorar la Santísima Cruz.

Este flujo continuo de personas de todo tipo y condición a un espacio localizado en un lugar inaccesible, hace que sea urgente plantearse una mejora en los accesos, sobre todo peatonales, al complejo.

Es por ello que el grupo municipal del partido político VOX propone la siguiente propuesta de acceso al recinto amurallado del Real Alcázar Basílica de la Vera Cruz de Caravaca, respetando sus valores históricos, culturales, sociales y religiosos; no en vano el conjunto es Bien de Interés Cultural desde el año 1944.

PROPUESTA DE ACTUACIÓN

Se propone un nuevo acceso peatonal desde el centro de la población hasta la misma puerta de entrada al recinto. Éste será accesible a todas las personas, independientemente de sus capacidades diferentes, por ello hablamos de conseguir una accesibilidad universal al Castillo de Caravaca.

Para ello, se realizan dos nuevas actuaciones a nivel urbano que en su conjunto consiguen dicha accesibilidad universal.

El punto de partida será el final de la Avenida Gran Vía. Mediante la adquisición de una de las viviendas situadas en la calle puentecilla cuyo solar tiene entrada tanto desde dicha avenida como desde la base de la cuesta del Castillo donde se ubica el monumento a los caballos del vino realizado por Rafael Pí.

En su interior se ubicarán dos baterías de ascensores que solucionan el desnivel de 22 metros de altura que separan los apenas 30 metros que hay entre sus dos fachadas, salvaguardando también la muralla medieval que se encuentra en su interior.

Dichos ascensores serán de consumo energético casi nulo, contando con gestión inteligente de sus movimientos, baterías eléctricas para el aprovechamiento de su energía potencial, y bajo mantenimiento, de manera que mientras que el flujo de personas sea bajo, se desactiven dos de los tres ascensores, pero cuando el flujo sea alto, puedan transportar a la vez un autobús completo.

La ubicación de la primera batería de ascensores en el interior de la edificación existente hace que el impacto visual sea nulo, tanto desde la Gran Vía como desde el Castillo y su cuesta, salvaguardando los valores del casco histórico del entorno del BIC. La segunda batería de ascensores tiene un impacto visual casi nulo, porque desde la Gran Vía no se aprecia al encontrarse tras la edificación existente, y desde arriba se retranquea ocho metros para que su impacto visual sea lo menor posible.

En efecto, la primera batería de ascensores, con tres unidades de 20 personas cada una, quedaría al interior de la edificación existente, subiría al flujo de personas de manera eficiente independientemente de su número por encima del nivel de la muralla medieval, que por lógica se debe encontrar dentro del edificio, haciéndola a su vez visitable, y desde ese punto otra batería similar los subiría hasta el nivel superior, quedando retranqueado de la alineación, de manera que su visibilidad disminuya, y quedando adyacente a las escaleras que se encuentran allí en la actualidad, de manera que las complementan.

Con ello conseguimos que las personas puedan acceder sin dificultad a la base de la cuesta de los caballos del vino, siendo sostenibles energéticamente hablando cuando hablamos de poca cantidad de personas, y eficientes en la gestión del tiempo cuando se trata de grandes volúmenes, como por ejemplo en el caso de grandes peregrinaciones.

Pero la subida por la cuesta es un reto para demasiadas personas, por ello, en la segunda fase de la presente propuesta, se instala una rampa mecanizada oculta paralela a la cuesta, de manera que todas las personas puedan subir hasta el canapé de acceso al recinto amurallado por sus propios medios.

Dicho recorrido accesible contará con dos rampas mecánicas que discurrirán paralelas a la cuesta, en su lado izquierdo, en el espacio que dejan las antiguas edificaciones que la flanquean y la propia cuesta, teniendo acceso desde la plaza inferior al canapé. Así quedará oculta tras las edificaciones adyacentes y la propia barandilla de la cuesta, teniendo un impacto visual casi nulo.

Para ello es necesario adquirir una segunda vivienda, la primera de la línea edificatoria para poder tener suficiente anchura para la rampa sin tener que tocar la cuesta, permitiendo también, como en la vivienda de abajo, espacio para servicio del Santuario, como aseos, centro de información o atención, almacenes, etc.

Con respecto a la instalación de fuentes de energía renovables, la idónea en estas latitudes son las placas fotovoltaicas, pero dado su impacto visual se desaconsejan en el casco histórico. No obstante, y dado que se trata de una instalación municipal, se podrían colocar en cualquier edificio público, y nutrirse de ellas.

CONCLUSIONES

Con la siguiente propuesta, el grupo municipal de VOX pretende aportar su grano de arena al engrandecimiento del culto a la Santísima y Vera Cruz de Caravaca, mejorando las infraestructuras turísticas, propiciando mejoras en la experiencia de los visitantes, ayudando a la iniciativa privada a encontrar más oportunidades, mejorando la sostenibilidad del modelo económico de la ciudad, y en definitiva mejorando la calidad de vida de los ciudadanos.

En el grupo municipal de VOX creemos en la proactividad y la colaboración como herramientas fundamentales para el desarrollo de las comunidades. Es por ello que planteamos nuevos retos y oportunidades en las que todos somos necesarios para poder llevarlas a buen puerto, con el objetivo común del progreso de nuestra ciudad.