El Ayuntamiento de Caravaca se suma este sábado, 25 de marzo, a la iniciativa contra el cambio climático 'La Hora del Planeta', con el apagado del alumbrado del Castillo y el Templete o Bañadero de la Vera Cruz, como monumentos y espacios representativos de la ciudad, en un año en el que adquiere aún más simbolismo por celebrarse el Año Jubilar 2017.
El concejal de Medio Ambiente, Enrique Fuentes, ha animado a los ciudadanos a que colaboren de forma particular con esta campaña global, que este año se convoca con el lema 'El Planeta primero. Que nadie te pare', apagando las luces de sus domicilios de 20.30 a 21.30 horas.
'La Hora del Planeta' es una campaña global de WWF que empezó en 2007 en Sidney, Australia, con el gesto simbólico de apagar la luz durante una hora como muestra de la lucha contra el cambio climático. Diez años después, se ha convertido en la mayor iniciativa mundial en defensa del medio ambiente y una llamada a movilizarse y a actuar de forma constructiva en defensa de nuestro amenazado Planeta.
El cambio climático es ya evidente, especialmente en regiones como el Ártico. Pero al mismo tiempo hay razones para el optimismo, el 4 de noviembre de 2016entró en vigor el Acuerdo de París para frenar el cambio climático. Este acuerdo mundial marca un punto de inflexión y el comienzo de una gran transición global hacia un desarrollo y una economía limpia y baja en carbono.
Cada año, ciudades de todo el mundo muestran su apoyo a la campaña apagando las luces de sus principales monumentos y edificios. El Acueducto de Segovia, la Torre de Hércules en La Coruña, la Mezquita de Córdoba, la Fuente Cibeles de Madrid, entre muchos otros espacios mundiales, se convierten cada año en un gran escenario de celebración y homenaje al Planeta.
Pero este gesto encierra mucho más, y es sólo el símbolo de un esfuerzo constante para construir un futuro sostenible. Son cada vez más los municipios que se suman a iniciativas en defensa del medio ambiente y que adoptan medidas de reducción de emisiones con la puesta en marcha de proyectos y programas que potencian la eficiencia energética, las energías renovables y la movilidad sostenible.
Esa es la verdadera hora que cuenta. La que sumada a 'todas las horas de esfuerzo' convierten a los ayuntamientos en auténticos vectores de cambio y superación de modelos energéticos obsoletos basados en los combustibles fósiles. Y que ayudarán a cumplir el Acuerdo de París de lucha contra el cambio climático. Más de 7.000 ciudades en todo el mundo se han sumado a la Hora del Planeta.