La cueva fue frecuentada hace cerca de un millón de años por seres humanos que dejaron su huella en forma de restos del fuego, fauna y útiles paleolíticos, entre ellos el hacha de mano más antigua de Europa
12/06/2022. Este domingo, 17 de julio, se celebra jornada de puertas abiertas al yacimiento de 'La Cueva Negra', situado en el Sitio Histórico Estrecho de La Encarnación, en Caravaca de la Cruz. La actividad se organiza coincidiendo con el desarrollo de la XXXI campaña de excavación arqueológica y científica, que se ha retomado este verano tras el paréntesis de dos años motivado por la pandemia.
El punto de encuentro para participar en esta visita guiada será a las 10.00 horas en 'La Ermitica', situada junto al río Quípar y la pedanía de La Encarnación, a pocos metros de la cueva donde se localiza el yacimiento.
"Los directores de la excavación expondrán la importancia de este yacimiento, convertido en todo un referente internacional para el estudio científico de la evolución humana, así como los trabajos que este mes de julio se están llevando a cabo con más de veinte expertos llegados de distintas universidades internacionales", según ha informado el alcalde, José Francisco García, quien ha querido destacar "la trayectoria y enorme implicación del profesor y científico Michael J. Walker al frente de este yacimiento durante más de tres décadas". "Su labor, junto a la de los arqueólogos Mariano López y María Haber como codirectores de la excavaciones, han situado al municipio de Caravaca de la Cruz como uno de los lugares clave a nivel mundial para el estudio de la Prehistoria y de los primeros pobladores europeos", ha señalado el alcalde, que la semana próxima presentará los hallazgos y avances de esta campaña de excavación junto a los responsables de la misma.
Las excavaciones realizadas en los últimos treinta años han aportado valiosa información sobre los primeros homínidos. La cueva fue frecuentada por seres humanos que dejaron huella de su presencia en forma de restos del fuego y un hacha de mano, siendo ambos los más antiguos de Europa.
Además, se han localizado numerosos útiles paleolíticos y abundantes restos de fauna, pertenecientes en muchos casos a micro mamíferos y a grandes mamíferos, de los que se pueden extraer conclusiones sobre los modos de vida y subsistencia del hombre en la Prehistoria.
En las sucesivas campañas de excavación, han sido recuperados restos de los animales que fueron la base de subsistencia de los cazadores y recolectores que habitaban la cueva hace casi un millón de años, desde mamíferos grandes a animales menores. La cueva ha proporcionado una interesante fauna (fragmentos esporádicos de oso, hiena, lince y mustélido), presencia de restos de especies extintas de rinoceronte, elefántidos (probablemente mamut), bisonte, un cérvido gigante, gamo, corzo, caballo, caprinos, jabalí, macaco, gato montés, conejo, liebre, ardilla, erizo, pika, ratas de agua, musaraña, tortuga, lagartija, rana, sapo, culebra, y 66 especies de aves. La identificación de 7 especies de aves acuáticas implica la cercanía de pantanos y la presencia de bosque ribereño.
Los seres humanos que habitaron en la cueva de la pedanía de La Encarnación probablemente pertenecieron a la especie extinta del "Hombre de Heidelburgo" u 'Homo heidelbergensis', que habitaba Europa hace 890.000 años, en el Pleistoceno, y fue especie ancestral del 'Hombre de Neandertal' u 'Homo neanderthalensis'.